A continuación te presentamos un listado de las mejores frases de San Agustín. Haciendo clic sobre ellas puedes ponerles nota y compartirlas.
La medida del amor es amar sin medida.
San Agustín fue uno de los más grandes pensadores de la historia de la Iglesia Católica. Nació en Tagaste, una pequeña ciudad de la provincia de Numidia, en el norte de África, el 13 de noviembre de 354. Fue el hijo de una familia de clase media, su padre, Patricio, era un funcionario del gobierno romano y su madre, Monica, era una devota cristiana. Durante su juventud, Agustín fue un estudiante brillante y una figura destacada en la vida social de Tagaste. Estudió retórica en Cartago, una ciudad cercana, y luego se trasladó a Roma para estudiar derecho. Después de unos años, se trasladó a Milán, donde conoció al obispo Ambrosio, quien lo influenció profundamente en su conversión al cristianismo. En el año 386, Agustín se bautizó y regresó a África. Se estableció en Hipona, donde se convirtió en un obispo y comenzó a escribir sus obras más importantes. Estas obras incluyen Confesiones, una autobiografía espiritual, y La Ciudad de Dios, una obra de teología que explora la relación entre Dios y el mundo. Durante su vida, Agustín fue uno de los principales defensores de la doctrina cristiana. Se opuso a la herejía de los maniqueos, que negaban la divinidad de Cristo, y también se opuso a la herejía de los pelagianos, que negaban la necesidad de la gracia divina para la salvación. Estas controversias lo llevaron a escribir numerosos tratados teológicos, incluyendo De Trinitate, De Libero Arbitrio y De Civitate Dei. Agustín también fue uno de los primeros teólogos en abordar el tema de la predestinación. En su obra De Praedestinatione Sanctorum, argumentó que Dios predestina a algunas personas para la salvación y a otras para la condenación. Esta doctrina se convirtió en uno de los principales temas de discusión entre los teólogos cristianos durante los siglos posteriores. Agustín murió el 28 de agosto de 430, en la ciudad de Hipona. Su influencia en la teología cristiana ha sido profunda y duradera. Sus obras han sido traducidas a numerosos idiomas y se han convertido en una parte fundamental de la teología cristiana. Un hecho poco conocido sobre San Agustín es que fue un gran amante de los animales. Se dice que tenía una gran afinidad por los perros y que solía llevarlos a la iglesia con él. También se dice que solía alimentar a los gatos cal